El libro "En mis
tiempos" de Desireé Acevedo es una nostálgica mirada atrás a una infancia
impregnada de simplicidad y riqueza imaginativa, un tiempo en el que la
ausencia de tecnologías modernas no era un vacío sino una invitación al juego
creativo y al descubrimiento. A través de palabras que fluyen con la ternura y
la calidez de los recuerdos compartidos, Desireé nos transporta a un mundo
donde los juguetes no son meros objetos, sino portales a universos de
posibilidades infinitas.
Los pomperos se convierten en
herramientas para moldear el cosmos, y la Rayuela es más que un juego: es un
viaje místico de la tierra al cielo. Cada objeto, desde el trompo que gira
vertiginosamente hasta las cometas que flotan en el aire, se carga de un
significado profundo, transformando lo cotidiano en lo extraordinario. Los
juguetes de madera, con su olor a bosque y flores, son creados con amor y
sirven como símbolos de una conexión perdurable con la naturaleza y con la
autenticidad de los afectos humanos.
Este poema también celebra la
importancia de la imaginación y el juego en el desarrollo infantil. Saltar a la
comba hasta "colgarse de las nubes" o hacer volar una piedra con un
tirachinas hasta las estrellas no son meras actividades lúdicas, sino
ejercicios de imaginación que trascienden los límites del mundo físico, permitiendo
a los niños sentirse poderosos y sin límites.
La inclusión de títeres y cuentos
subraya el valor de la narrativa y cómo las historias pueden servir como
vehículos de enseñanza, entretenimiento y consuelo. Los cuentos, en particular,
son destacados por su capacidad para abrir puertas a mundos nuevos, invitando a
los niños a perderse en sueños y aventuras que fomentan la curiosidad y el amor
por la lectura.
"En mis tiempos" es más
que una simple evocación de los juegos infantiles del pasado; es un
recordatorio de que la riqueza de la infancia radica en la capacidad de
maravillarse, explorar y crear. En una era dominada por pantallas y
dispositivos electrónicos, el poema de Acevedo ofrece una perspectiva
refrescante sobre los valores perdurables de la imaginación y el juego al aire
libre, sirviendo como un llamado tanto a los niños como a los adultos para
redescubrir la magia que reside en las cosas simples de la vida.